sábado, 17 de octubre de 2009

Luz sin Fuerza


Recientemente el gobierno federal ha decretado la extinción de la dependencia Luz y Fuerza del Centro, empresa que desde 1881 fue abrigo y sustento para varias generaciones de mexicanos así como testigo presencial del desarrollo energético del país.
Lo cierto es que bajo los esquemas gubernamentales recientes, la inoperabilidad de las paraestatales es la principal excusa para privatizarlas, curiosamente una vez que forman parte de la iniciativa privada, los otrora elefantes blancos se convierten automáticamente en exitosos ejemplos de buena administración y éxito corporativo, como ejemplo puedo mencionar a TELMEX que de ser una dependencia ineficiente se convirtió en una de las empresas de telefonía más importantes de América Latina, también FERROMEX (Union Pacific), antes Ferrocarriles Nacionales, empresa de la cual Ernesto Zedillo es miembro del consejo de Administración y hoy bajo su renovado esquema es el resurgimiento de un monopolio, como olvidar a la inepta MEXICANA DE AVIACIÓN del GRUPO POSADAS, que recientemente renovó su imagen para ingresar con éxito en otros mercados o la obsoleta AEROMEXICO, dirigida por el expresidente del CCE (coordinador de los spots contra el PRD en 2006) y adquirida por CITIBANK controladora de BANAMEX, la cual en 2008 obtuvo las mayores ganancias de sus filiales, incluso mayor que sus operaciones en Estados Unidos.
La semana pasada, 40 mil familias quedaron sin sustento, perdiendo no solo la seguridad del alimento sino la esperanza de un futuro con horizonte; la "jugosísima" liquidación, en promedio de 340,000 pesos se muestra como un favor del benevolente gobierno a décadas de constancia en el trabajo y la opción al "autoempleo" suena más a burla ante la creciente inflación y los venideros impuestos.
LYFC pasará a ser operada por la CFE, sin embargo llama la atención que la administración de las redes de fibra óptica en posesión de la ex dependencia, valoradas en miles de millónes de dólares, pasaron al servicio de enajenación de bienes y presumiblemente a las buenas manos de Ernesto Marstens y Fernando Canales, ex secretarios de Energía, que sabrán hacer buen uso de estas, especialmente ahora que está en boga el triple play. Estas dos familias podrán gozar de un horizonte que les fue arrebatado a millares de otras, bajo lo que a todas luces parece un hurto.
Pero ya bien mencionaba hoy Calderón, esta empresa era un freno al desarrollo del país y se perdieron millones de empleos por su ineficaz operación, demos pues un voto de "confianza" al presidente del empleo en que las cosas mejorarán y el crecimiento se detonará, ya que después de esto no hay más pretextos, o es que todavía quedan más?

1 comentario:

  1. Prepárense que estamos a nada para que el señor Calderón vuelva a declarar estado de emergencia por influenza y así pueda aprobar todas las leyes que le vengan en gana.

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