sábado, 18 de julio de 2009

Mexicano Global

Identidad, identificarse, sentirse parte de, sentido de pertenencia, ser social. Intentare ser breve. El ser humano es un ser social, por ello se organiza, necesita de alguna manera integrarse a la sociedad, interactuar, el ser humano forma grupos donde se sienta agusto, donde pueda sentirse como apoyo y apoyado, donde pueda aportar y enriquecerse, donde se identifique... Las naciones se pueden ver como grandes grupos sociales conformados por miles y miles de pequeños grupos de este tipo. Como mencionaba por ahí un escritor de este blog, la identidad no son los himnos, no los símbolos, ni las imágenes. No, esos son parte de la cultura, al igual que el lenguaje. Cultura. Y la identidad, creo yo, viene de la cultura, esa fuerza que te lleva a sentirte entendido por alguien más. Entendido por una cultura. El mexicano ¿está confundio? ¿es mera conveniencia? A decir verdad no puedo hablar por los demás, desconozco de sociología, etnología, antropología. No obstante puedo hablar de mis sentires, de mis experiencias. Me encanta México, me siento bien en él, con sus pros y contras, soy feliz, aquí crecí. He experimentado otras culturas, pero no soy yo, son cálidas, educadas, respetuosas, pero no son mi México. Cuando viajé al extranjero sentí esa necesidad de corrupción. Me sentía raro sin ese miedo a ser secuestrado. Hacía filas donde el único formado era yo. Mis oídos extrañaban las armoniosas vulgaridades orales de los peatones y conductores. No veía a mi indígena explotada por las calles vendiendo sus pulseras. No. Extrañé mi México. Al igual que extrañé mi mole con pollo y ajonjolí. Mis chiles rellenos y enchiladas. Los coros angelicales de los niños cantando en las posadas. El color y la alegría de nuestras fiestas. La sátira con que vemos la muerte. La calidez de una sonrisa en el metro. Mis ricos dulces culpables de diabetes. El desmadre en algún evento musical o un partido. El sudor de la frente de mis trabajadores explotados. El sabor de una tortilla hecha con cal y sudor de todos los que en ella laboraron, desde el marginado agricultor del tan delicioso maíz, hasta la ignorante vendedora de tortillas que, estereotipadamente, masca un chicle. Mi mezcal y mi tequila directo de la botella sin que me dijeran "hazte un chupito con limón y sal". A mis amigos y sus albures con cuadruples sentidos. Extrañé los trámites burocáticos del gobierno, sin ellos me sentía agobiado. Lucha. Lucha. El mexicano sera un pendejo, al igual que su gobierno, pero no es wevon como nos han hecho creer. Mis paisajes naturales, ya odiaba ver mismos terrenos planos con el mismo estúpido arbolito o el mismo retrasado pinito. Me gustaban, no lo niego, pero fue monótono. Quería mis mares. Mi Veracruz. Mi neblina. Mi potosina. Mi desierto. Mi Quemada. Mi Bajío. Mis Túneles. Mi Ciudad "nada" cosmopolita. Mi Selva. Mis Zonas Arqueológicas. Mi Chiapas. Mi gente. Que aunque me digan que no son de nosotros, lo sabemos de antemano, llevamos toda la firma de nuestro antepasados, españoles o indios, africanos o mestizos, tente al aire o criollos, mis chinas con cambujos, y demás. Es nuestra herencia. Nuestras tierras. Nuestras guerras. Nuestra ignorancia. ¿Qué pasa si no le apuesto a mi México? ¿Quién más lo hará? Muchos huyen en el intento, prefiere dinero, fama, éxito. Y quién no, mientras te sientas apoyado, podrás sentirte identificado. Quizá ese apoyo no se encuentre aquí, y eso es válido. No para mí. Afuera no soy yo. Afuera sólo soy un conocedor más. Un trotamundos. Una sombra que no está completa. Soy feliz afuera, pero en mi México soy una persona plena. ¿Conformismo? No lo sé. Pero me toca luchar, aportar ese granito de arena. No hay peor derrota que aquella batalla que no se pelea. Tengo fe. Es mi arma. Y aunque muchos mexicanos aún están perdidos, o por conveniencia no gustan apoyar, yo sí lo haré, a pesar de este gobierno que nos toca: "cada pueblo tiene el gobierno que se merece", tienen razón los que dicen eso. Podemos cambiar. Expulsar al ajeno. En lugar de salir los comprometidos y los que nos sentimos identificados, mejor expulsar al impostor, al que perjudica, al que no aporta. Hay muchos, pero es de humanos errar y revindicar el camino. Aunque suene como iglesia barata de autoayuda.
Me ha tocado compartir palabras con muchos extranjeros. Muchos aman México. Algunos olvidan su país. Otros tienen los mismos sentimientos que yo. Otros fusionan ambas nacionalidades. Cualquier acción es válida y es hermosa. Somos humanos. La clave es encontrar nuestro rincón, nuestra felicidad y dar todo por ella. ¿Qué le falta a México para ser primer mundo? Es la pregunta que muchos extranjeros se han hecho. No me gustaría autodenominarme "primer mundo", es un estereotipo a fin de cuentas. Todos somos uno pero a la vez somos muchos. Algo le falta a México. Por mi parte quiero apostarle todo a la educación. Con la educación se puede luchar contra lo ajeno, y cabe recalcar que lo ajeno no es sinónimo de extranjero. Lo extranjero puede ser tan propio como lo propio puede ser extranjero. No hay que perder el camino y sobre todo, lo que más me encantaría es conocer el mundo con mi cultura a mi lado, respetando a los demás, tratando de comprender a los demás, sientiendo que me comprenden, y quizá en un futuro, llegue a ser un "mexicano global", que disfruta de las otras culturas, se enriquece de las otras culturas, y de manera automática y a la par, disfruta su propia cultura y la enriquece...
No quería redundar con lo que muchos habían ya expresado, mis disparidades ya las escribí en cada blog, así que por eso expreso mis sentimientos, que rara vez son positivos, pero cuando se trata de mi México, trato de cortar lo negativo y enfocarme en lo positivo para después hacer cambios, comenzando por mí. Y como paréntesis final, si creo que las organizaciones en México tratan mucho a las culturas indígenas como un tipo fuerte de marketing para traer a los demás. ¿Qué país no lo hace? Sin embargo hay una diferencia, un país educado sabe por qué, para qué, cómo, quién, dónde, lo (se) hace; un país ignorante le toca ser explotado, y lo peor, ni siquiera sabe por qué se apena, se deja enajenar... no lo entiende...
Gracias

8 comentarios:

  1. Ver la cultura desde un punto de vista más informado gracias al contacto con otras culturas extranjeras representa tener una visión - en cierto modo - más maduro de las cosas. Es más fácil así poder brindar una opinión sin encerrarnos en "Mi México", pues como tú lo dices, siempre es mejor aceptar que México no es perfecto y que debemos ver sus flaquezas pero también sus riquezas y a partir del sopesamiento de ambas poder construir algo que permita progresar.

    Me hiciste pensar en los viajes al extranjero y sobre todo en el corto de "Paris je t'aime"...el corto sobre la señora que se siente sola pero que ama el lugar donde esta y las experiencias que vive...el sentimiento de homesickness!!! oh dios!!

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  2. JAJAJA si, esa señora. Pues la verdad es demsiado relativo, igual eso fue lo que me pasó a mí, fue lo que sentí y ps es como veo la situación. Y si haha ese corto como me hizo chillar en Canadá!!!! NOOOOOOO no no, como va la frase final? "...y al final sentí que por fin Paris me sonreia"? "aceptaba"? ay nooo nooo que recuerdos!!
    Grax

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  3. Jajaja, buen post, me hizo reir en unas partes como con la tortillera chiclera.. Yo también quiero hacer mucho por México, pero lo haré siempre y cuando se deje, hay veces que nomás no se deja...

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  4. Hablar de la cultura de México, de la comida, creo que es algo diferente al sentido de identidad, yo en lo personal amo la pizza, la amo, me fascina la comida italiana, quisiera conocer esa tierra, comérmela con los ojos, vivirla, sentirla, pero no por ello amo a Italia o a los italianos.

    Recuerdo como hace poco fui a Michoacán, esa herencia cultural tarasca maravillosa, esas calles, esa magia que yace en sus pueblos antiguos, ese color, ese sabor, esos olores, me encanta, pero nunca viviría ahí. Caminando por Tzintzuntzán mi madre quiso comprar unas flores, estaban dos indígenas vendiendo en la calle y ella decidió comprar a una y no a la otra, la que perdió el cliente veía con coraje y envidia a la que si gananaba dinero, la otra, temerosa agachaba la cabeza, como si fuera algo malo vender su producto, terminó diciéndole a mi madre que si la otra mujer le preguntaba si le había comprado le dijera que no.
    Para mi, esa identidad nefasta me hace no querer estar aquí, ese tipo de actitudes realmente me molestan, si fueran exclusivas de unos cuántos lo entendería, sin embargo parece que a los mexicanos los han rociado con el agua de la desgracia y oh sorpresa quien lo hizo fue otro mexicano..
    "La clave es encontrar nuestro rincón, nuestra felicidad y dar todo por ella."
    Más que amar a México, amo mi espacio, mi individualidad, el lugar que creo a mi alrededor, no me gusta que me molesten, es lo único que pido, mi lugar es el mundo, mi lugar es donde sea feliz, donde me llene, donde crezca, donde produzca.

    Saludos uli :)

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  5. Aplausos, aplausos y más aplausos!!
    Grande este post... Ojala todos los mexicanos tomaran la identidad tal cual como vos la tomas!!
    FELICIDADEES!

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  6. HAHAHAHA Fernandito!! preguntale a un japonés si está feliz de ser oriental!! de su machismo, de su ritmo de vida. Preguntale a un español si esta feliz con su burocracia. A un frances si está feliz por su competencia laboral y por los problemas causados por la inmigración. A un italiano del norte si está feliz en compartir su territorio con los marginados del sur... En todos lados se cuecen habas, y pues si nos ponemos a buscar cada defecto, nunca nos encontraremos agusto ni felices ¿por qué? porque no aceptamos los defectos de los demás, porque no aceptamos incluso nuestros propios defectos...

    No lo sé... En fin!!! Muchas gracias Karnaleiro!!! pero si tienes razón, yo también amo mi individualidad, y como sabes hahaha AMO MI PLANETA TIERRA, por algo no he dejado de respirar, a pesar de tanta podredumbre!!!!

    Grax Román!! Quisiera hacer lo que tu, viajar, y poder ver la vida de esa manera tan amplia :-) Creo que es lo que nos falta, fortaleza para aceptar quienes somos y poder respetar al otro, al ajeno... que a final de cuentas, no nos es ajeno, es otro ser humano con vitudes y defectos...

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  7. "Es nuestra herencia. Nuestras tierras. Nuestras guerras. Nuestra ignorancia." Todo eso que desribe Uli es nuestro, y así como Fer se aferra a su indiviadualidad, todos los mexicanos se aferra a la suya (a su identidad).

    Woow se contrapone totalmente a la entrada de Fernando, y eso en eriquecedor. Dos ideas que coexisten en un mismo espacio.

    Indescriptible entrada Ulito, no puedo decir más, es una visión tan llena de alegria, esperanzadora, plena, feliz (me identifico con esa actitud), y más que hablar de México, habla de ti, de tu sonrisa, de tus miradas llenas de emoción, de tu voz y de tus ideas, casi puedo verte en tus letras. Que impresionante.

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  8. Uliiiiiiiiiiiii
    amigo se ve que me conoces u_u

    concuerdo con iván, eso es padre

    Saludos!

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